8 de febrero 2010; un atardecer poco común en la ciudad de México, algo muy especial, un regalo de la naturaleza para tus ojos. Los volcanes Popocatepetl, Iztaccihuatl (mujer dormida) y Xitle (Ajusco) y en el crepúsculo el sol pintó una extraordinaria gama de matices de bellos colores. Vista del cielo al sur de la ciudad de México.