En la explanada que se encuentra frente a los vestigios del monumento se localizan la fachada principal y, a corta distancia, los restos de una escalinata doble con sus tres alfardas; dos de ellas angostas en los extremos y una ancha al centro que las separa. Aparentemente esta última representa el testimonio de la cuarta o última construcción del basamento de Santa Cecilia, cuyas proporciones debieron ser monumentales. La piedra con la que se construyó, lo mismo que la de las etapas anteriores, fue utilizada por los habitantes de la época colonial para levantar sus edificaciones. Esto se puede apreciar en algunas casas de los alrededores y en la pequeña iglesia de finales del siglo XVI que está ubicada frente al monumento prehispánico.