SPANISH: El rinoceronte negro es prácticamente hoy día una reliquia de la época en que mamíferos y ungulados eran las especies dominantes del planeta.
En estado crítico de extinción, solo pequeños grupos de esta especie se encuentran en las sabanas del este y del sur de África .
En el área del Ngorongoro y Serengeti existían más de 1000 individuos al inicio de los 70´s. Estos fueron rápidamente exterminados por cazadores ilegales en busca de su valioso cuerno, al cual, a través del medio oriente y Asia, se le atribuían efectos afrodisíacos, medicinales, y para construir el mango de cuchillos y dagas. Su valor era varias veces mayor que su equivalente peso en oro.
Al final de la década de los 80`s, solo unos 25 individuos en el cráter del Ngorongoro, y unos 12 (doce) en la región del Serengeti fueron reportados.
Al disminuir el número de individuos en estas regiones, los cazadores entonces enfocaron su atención en el rinoceronte blanco, el cual sufrió una, aun más rápida y despiadada, exterminación. Varias campañas para su protección fueron puestas en marcha a principio de los 90`s para tratar de preservar estas especies de lo que parecía ser una ineludible extinción.
Con el incremento y popularidad del ecoturismo en África , muchos países crearon leyes estrictas con el propósito de proteger sus parques y fauna salvaje, la cual había comenzado a generar una considerable parte del ingreso económico de estos países. Condenas de muchos años de cárcel y hasta pena de muerte fueron impuestas a los cazadores ilegales, y hoy día estas regiones son celosamente protegidas por guardias y personal especializado.
Los rinocerontes tienen pocos enemigos naturales debido a su tamaño y a su lábil temperamento, esto sin tomar en cuenta su impresionante cuerno que suele llegar hasta más de 32 pulgadas de largo. Sin embargo, algunas crías pueden caer víctimas de grupos de leones o hienas, sobre todo cuando estas se separan de su madre o esta no es capaz de reaccionar a tiempo.

En esta foto se observa una madre de rinoceronte negro con su cría en el cráter del Ngorongoro los cuales se dirigen a tomar agua en uno de los muchos pozos de agua naturales que se encuentran en esta región.
Esta foto fue tomada justo antes de la puesta del sol, y desde una distancia de más de un kilómetro usando un lente telefoto de 1200mm de alcance.

Canon 1Ds Mark II
Canon 600 mm f/4.0 IS USM + Canon EF 2.0x II Extender (1200mm)
1/800s at f/8
ISO- 200 Luz ambiental –
Gitzo MK2 Reporter Carbon Fiber Tripod
Wimberley WH101 Head w/Quick Release C30